Prince regresó a la televisión alemana e interpretó "The Greatest Romance Ever Sold", que en este país aún no había sido vista. La novedad de esta actuación con respecto a las de otras televisiones europeas estuvo en los atuendos de la banda, sobre todo, el del propio artista, que con una túnica de aire religioso, como si de un mesías se tratara, realizó un número muy similar al de otras actuaciones. No hay nada más que destacar de esta aparición, si bien hablar de ella puede resultar poco novedoso, en aquellos tiempos, la primicia de ver al artista en televisiones europeas era muy agradable para los fans de cada país. Prince se esforzaba por recuperar su gancho como artista cuando el contrato con Warner Bros. estaba a punto de finalizar.
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