20 de febrero de 2013

1989. El resurgir desde las tinieblas

Sin duda 1989 fue el año de Batman, y fue este personaje el que dicen que sacó rápidamente a Prince de una situación económica relativamente precaria para un artista de su importancia. Había acabado su gira en noviembre del pasado año, pero las fechas en Japón ya estaban cerradas y en febrero tuvo que salir al escenario para finalizar definitivamente con ocho últimos conciertos de una gira ruinosa.

Por esas fechas Prince ya había visitado a Tim Burton que le enseñó todos los entresijos de la grabación de la película "Batman" que se convirtió ese año en una auténtica superproducción y éxito asegurado. Ambos se entendieron muy bien, y pronto cuajó la colaboración, Prince pondría la música para la película, así que, en la primavera de 1989 se empapó de los personajes y comenzó a crear la música para Batman.

A la vez que trabajaba en ello, Prince, una auténtica máquina de componer le sobró tiempo para escribir y producir junto a Madonna el tema "Love Song" que se publica en el álbum "Like A Prayer" de la cantante. A pesar de no figurar en los créditos es seguro que Prince participó en tres canciones más. Además, en mayo se edita el álbum "Time Waits For No One" de Mavis Staples, el primer disco de ésta con la etiqueta Paisley Park. Prince aportó seis canciones y las produjo. Tuvo buena acogida y la combinación de la mezcla rock/funk/soul de Prince con el fuerte y personal modo de cantar de Mavis demostró ser muy eficaz.

Pero para junio ya lo tenía todo dispuesto y edita la música para la película "Batman". Este disco supuso la vuelta al foco del éxito en su país después del frustrante lanzamiento del anterior álbum. La trascendencia de la película en ese momento y la buena promoción de sus singles con los video-clips de "Batdance"  y "Partyman", volvieron a hacer de Prince el rentable artista de antaño. El disco no gozaba de esa calidad a la que nos tenía acostumbrados, pero las modas son las modas, y la música estaba muy bien ambientada en el personaje del cómic y la película en sí, por lo que el éxito fue rotundo. A los pocos días el álbum "Batman" ya alcanzaba su segundo platino y el single "Batdance" ya era Disco de Oro situándose en el número 1 en las listas americanas y en el 2 en las británicas. El otro single "Partyman" también se convirtió en Disco de Oro en noviembre.

Ese año, Prince decidió no complicarse la vida y dejar que Batman le llenara las arcas por si solo. No salió de gira, pero el genio no podría estarse quieto ni por un solo instante. Fascinado nuevamente por su otra pasión, el celuloide que tan de cerca volvió a vivir en ese año, en su mente ya comenzó a fraguarse su tercera película, un film que pretendía ser la segunda parte de "Purple Rain".


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