Este fue el programa televisivo en el que Prince tocó en directo por primera vez y, curiosidades de la vida, también fue el último para las mismas circunstancias. En sus más de cuarenta años de historia, fue la primera vez en el que este programa permitió tocar a un artista durante más de ocho minutos, pues el formato habitual era el de dos canciones de unos cuatro minutos cada una para hacer la habitual pausa publicitaria. Sin embargo, Prince lo exigió así y resulto ser una actuación interesante. Realizó un medley de canciones nuevas, se supone que para promocionar el lanzamiento de sus dos nuevos discos "Plectrumelectrum" y "Art Official Age", lo cual fue muy de agradecer. Comenzó con "Clouds" a los teclados, con un look espacial que llegó a ser criticado por su excentricidad, cantada a duo con la cantante británica Lianne Las Havas, como en su versión de estudio, y finalizando con un efecto muy bonito donde parecían caer copos de nieve en el plató. La enlazó con la instrumental "Plectrumelectrum" donde un percance técnico fue la anécdota de la noche: alguien no había enchufado el cable a la guitarra de Prince que durante los primeros segundos no pudo hacerla sonar. La siguiente fue "Marz" donde ya se quita las gafas de los tres ojos para tocar un rock muy potente. La última, la preciosa "Anotherlove", con mucho espacio para las guitarras. Particularmente esta aparición no es de mis favoritas, hay algunos momentos en los que las guitarras hacen más ruido que otra cosa, lo que desviste un poco la actuación. La duración tal vez juegue en contra dado el nivel de decibelios a los que estaban tocando, cuestión de gustos.
1 comentario:
Efectivamente, cuestión de gustos, si bien comparto plenamente tu opinión: el medley estaba bien planteado pero la ejecución no fue la mejor. Hubo mucho ruido y pocas nueces para mi gusto. Recuerdo con mucho más cariño la actuación de 2006 con un "Fury" brillante que dió mucho que hablar y con una bonita interpretación de "Beautiful, Loved And Blessed" que fue mucho más de mi agrado que esto.
Hay que reconocer que, en su genio, Prince era un poco excéntrico en ocasiones con estas cuestiones y ello podía desvirtuar la calidad de su trabajo. Creo sinceramente que era algo a lo que no se pudo sustraer jamás del todo. Cosas del carácter de cada uno...
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