23 de octubre de 2013

¿Principe o rey?

Decían que los años noventa iban a ser de Prince. Sin embargo, a tenor de los altibajos de sus últimas grabaciones, podría afirmarse con mayor propiedad que han sido los ochenta los años de mayor y mejor creatividad del siempre personal Prince Rogers Nelson.

1984 se convirtió en el año de su encumbramiento. La banda sonora de la película - ¿autobiográfica?- Purple Rain vendió nueve millones de copias sólo en Estados Unidos y fue considerada unánimemente como el disco del año. La base para tan brutal éxito había sido su grabación anterior, un fenomenal doble disco llamada 1999, con el que Prince aplastó a la competencia con un río interminable de creatividad. Con 1999, Prince salió del gueto de las listas de música negra al que habían sido relegadas sus primeras tres grabaciones, y acceder de forma masiva al gran público. La gente descubrió la capacidad de provocar de este minúsculo elemento -hablando de tamaño físico- y a partir de ahí... todo rodado.


Desde entonces, y tomando como cabecera el ya citado Purple Rain, Prince ha conseguido una casi perfecta serie de grabaciones, que sólo ha empezado a torcerse en los últimos tiempos, cuando la dificultad y aridez de las canciones se han hecho incompatibles con las ventas millonarias. Tal vez por eso, ahora que se cumplen quince años del lanzamiento de For You, su primer disco, Prince ha hecho examen de conciencia. El resultado no ha podido ser mejor: dos discos de Grandes Éxitos, más un tercero dedicado a temas raros o poco conocidos. Y de pripina cinco temas nuevos. Durante su carrera Prince ha lanzado a multitud de grupos y ha compuesto canciones para otros artistas. Sólo por eso ya debería ser recordado, pero al observar su ingente producción total acaba asombrando su capacidad creadora.

Por eso, no había suficiente con un Grandes Éxitos, y ha sido imprescindible recurrir a dos. Y en este caso, dos príncipes bien valen por un rey.

PRINCE. The Hits I y II. B Sides. WEA.

Prince es uno de los pocos artistas que han tenido el control de sus discos desde la primera grabación. Su habilidad con la música se ha hecho extensible también a los contratos, y de esta forma hoy es incluso vicepresidente de la compañía que edita sus gracones, Warner Music. Así hay que entender que las canciones incluidas en ese lanzamiento han sido elegidas personalmente por él y que obedecen al doble rasero de popularidad y gusto personal. La forma de venta también es curiosa. Los dos volúmenes de Grandes Éxitos se venden por separado, pero también denro de una caja, que leva como añadido un tercer disco con temas que aparecieron únicamente en las caras B de sus singles. Además, los cinco temas nuevos repartidos entre los tres discos son muy buenos y forman parte por derecho propio de esta colección de los mejores temas del carrerón de Prince. Resumiento: la retahila de canciones -son 56 en total-, es sencillamente impresionante.


RÁFAGAS

La versión en directo de Nothing Compares To You -un tema propio que Prince nunca había grabado- pone los pelos de punta. Una canción sensual a la que este obseso del sexo saca, lógicamente, el máximo partido, ayudado por ese incomparable falsete marca de la casa.

Pink Cashmere, una de las cinco canciones nuevas, será el primer single. Está grabada en directo y es una balada muy soul y elegante en la que destacan unos largos y limpios punteos que contrastan con la voz de Prince, una vez más, en falsete.

La seguridad de Prince en sí mismo queda plasmada en las tres portadas. Ni una sola letra o indicación de lo que contienen los discos. Tres fotos del artista de Minneapolis, eso sí, diferentes entre sí, y basta.


Fuente: Nº 393 de la revista "El Gran Musical". 30 de agosto al 12 de septiembre de 1993. Artículo firmado por Jorge Flo.

2 comentarios:

The Jolly Roger dijo...

Es, desde mi opinión, el mejor recopilatorio que se ha hecho de él (acertadísimo lo de las caras B por el gran material que quedaba olvidado) y uno de los mejores que he visto por ahí.

No obstante, creo sencillamente que la mutilación de ciertos temas, si bien por cuestiones de tiempo y espacio, fue criminal, y que quizá, al menos con los temas clásicos, que no con las caras B, se tenía que haber echado mano de un criterio más selectivo y reducir el número de canciones para, por lo menos, dejarlas enteras.

Pese a ello, este tipo de publicaciones siempre generan controversia acerca de lo que es o no esencial. No voy a entrar en ello. Sigue siendo y será mi recopilatorio favorito, aunque ahora, vendría de perlas una supercaja que recopile TODO desde sus inicios hasta el día de hoy...

También supongo que eso será mucho pedir...

greetfunky dijo...

Totalmente de acuerdo. Editar, por ejemplo, "I Could Never Take The Place Of Your Man" no tiene perdón de Dios...